La Junta Central Electoral (JCE) no está en asumir el arbitraje y reglamentación de las primarias de los partidos políticos que acordó la comisión especial del Senado que analiza la reforma de las leyes electoral y de partidos políticos.
El presidente Román Jáquez y los demás miembros JCE estiman que el tribunal solo debe limitarse a poyar y supervisar las actividades.
Los senadores se la han puesto dura a la JCE en cuanto a regular los gastos de campaña, organización de los debates a nivel presidencial, elaboración de listas cerradas y bloqueadas a nivel de regidurías y en lo concerniente a los informes y sanciones.
El Senado también exige a la JCE regular las alianzas y coaliciones, el criterio de paridad y decidir sobre los plazos. La JCE, aunque con mucha altura, ha pedido a los legisladores que le bajen un poco la carga sobre la reforma de las leyes que se discuten.