Hay personajes que quedan inmortalizados en la historia por sus hazañas y conquistas, logrando con su resiliencia el sitial de líder.
Viendo los sucesos politicos recientes nos llamó la atención la victoria de Donald Trump, que contra todo vaticinio de las encuestas, logró una victoria arrolladora en esa poderosa nación.
Como sacado de un guión de una película de Hollywood, viendo todos los obstáculos que enfrentó, el descrédito a que fue sometido, el asedio político y hasta judicial de sus adversarios, incluso varios intentos de asesinatos, pruebas superadas que parecían insorteables.
Este escenario nos hace reflexionar y hugar más dentro de este personaje, sus convicciones y pensamiento, para poder comprender mejor la proeza de su victoria.
Cuando Donald Trump era presidente para el año 2017 se dirigió a los graduandos de Liberty University con repeticiones de «nunca se rindan», «el futuro es de la gente que trabaja duro, de los soñadores, no de los críticos».
La alocución estuvo cargada de frases inspiracionales, religión, familia y nacionalismo.
Resaltó que «mientras yo sea su Presidente, nadie les impedirá practicar su fe o predicar lo que hay en sus corazones», recordando su juramento de lealtad a la bandera estadounidense: «Esta es una nación bajo Dios», e insistió.
«En Estados Unidos no le rendimos culto al gobierno, le rendimos culto a Dios». Pidió a los graduandos convertirse en «guerreros de la verdad», en vista de que conformarán la próxima generación de líderes.
También que en sus corazones guarden «sacrificio, devoción, y nunca dejen de luchar por lo que quieren».
Les recomendó usar la palabra «imposible como motivación» y no faltó el «tienes que hacer lo que amas».
«Las cosas que valían la pena nunca, nunca, nunca, vinieron fáciles».
Trump es un ejemplo de resiliencia
Trump se dirigió a las familias y a las madres, «porque este domingo es el Día de las madres» y dijo que todos tenían que estar muy orgullosos de ellas, y ellas, a su vez, de sus hijos.
Este discurso condensa su pensamiento positivo, su fe y compromiso con la Patria, la familia, las madres y su determinación, son pinceladas de sus convicciones y la fuerza que mueve su razón.
Definitivamente Donald Trump es un excelente ejemplo de la resiliencia de un líder.