Las siluetas clásicas y estilo princesa, así como las combinaciones del rosa pálido con el negro, los colores metálicos y el negro por sí solo, fueron la tendencia de este año en la alfombra roja de la edición número 92 de los premios Oscar.
Entre nuestras favoritas figuran: Sigourney Weaver, quien lució hermosa en un diseño verde de Dior. Fue la más elegante de la noche.
Scarlett Johansson desfiló mostrando sus impactantes curvas en un Oscar de la Renta; mientras que Regina King estuvo regia con escote asimétrico de Versace.
La cantante Janelle Monáe fue atrevida y dio en el clavo en un vestido con capucha de Ralph Lauren, formado por más de 17,000 cristales de Swarovski.
Las menos favoritas fueron fácil de elegir. En primer lugar está Billie Eilish, la joven artista, que tiene un estilo único y no queremos ser crueles, pero por su atuendo, al parecer después de su actuación en los Oscar grabaría un episodio de la “Familia peluche”. Su traje Gucci no estuvo acorde para la ocasión.
De su lado, Penélope Cruz lució un vestido muy clásico de Chanel, cuyas proporciones no eran tan perfectas para ella.
Gal Gadot fue una de las más esperadas, pero nos decepcionó. La actriz apostó por combinar rosa pálido y negro en un diseño de Givenchy. El look completo lucía cargado, con la blusa de cuello alto de encaje y las joyas.
