Tras cuatro temporadas quedando en el último lugar del torneo de béisbol otoño-invernal dominicano, hoy los Toros del Este se colocan en el umbral de la postemporada.

Luego de una batallada victoria 2-1 sobre los Tigres del Licey, el conjunto de La Romana pone su número mágico en uno para avanzar y convertirse en el segundo equipo que lo hace en esta campaña, detrás de las punteras Águilas Cibaeñas.

Los romanenses apelaron a su “torolío” para dejar en el terreno a los Tigres, gracias a una línea de sacrificio al centerfield conectada por Yairo Muñoz, quien remolcó desde tercera a Rudy Martín.
La primera vuelta de los Toros fue producto de un cuadrangular solitario pegado por Eloy Jiménez, quien ya ha despachado cinco en la estación.

“Desde bien temprano el dirigente (Víctor Estévez) me dijo que me preparara porque me iba a necesitar tarde en el juego y así lo hice”, manifestó Muñoz, quien tomó el decisivo turno viniendo desde la banca en sustitución del receptor Tres Barrera.

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“Estévez me dijo que si se presentaba un turno especial sería mío”, añadió Yairo titiritando del frío tras recibir un baño de agua con hielo por parte de sus compañeros para celebrar el triunfo.

El batazo de Muñoz fue bien corto al jardín central, donde el defensor Emilio Bonifacio pudo haber puesto fuera al corredor Martín, en caso de no haber sido desviado el disparo realizado al plato.
Sobre el momento que viven los Toros, Yairo significó que la vibra que se siente en el equipo es diferente a otros años.

“Tienes que entrar a ese clubhouse y pasar cinco minutos con nosotros para que entiendas lo que se vive ahí dentro, porque si yo te lo explico, no lo vas a entender”, expresó el pimentoso infielder al ser entrevistado luego del encuentro por la cadena de los Toros.