Articulistas Opinión

Tradición y orgullo

Tradición y orgullo

Carlos Manuel Estrella

La festividad de Santiago Apóstol el Mayor, como patrón de la Ciudad Corazón, es un acontecimiento que se remonta al inicio de la colonización de América y que ofrece un signo de identidad, religiosidad y tradición que contribuye al perfil de una comunidad orgullosa de su origen y vanguardismo.

El 25 de julio está vinculado al nacimiento de la ciudad de Santiago de los Caballeros, establecida en 1495, apenas tres años después del inicio de la verdadera globalización con la hazaña de Cristóbal Colón, y que tuvo dos emplazamientos anteriores al actual, en las cercanías de Rafey y en Jacagua.

 En una vida de más de 500 años, Santiago mantiene el vínculo con la hispanidad más pura pues resulta que el mismo apóstol y peregrino es el patrón de la Madre Patria y Santiago de Compostela, en España, es lugar de veneración y émulo del camino seguido por el santo en su labor religiosa.

La heráldica, con el escudo santiaguero, recuerda al mismo personaje con las doce veneras o conchas de protección de colores rojo y blanco y así otros pasajes del Patrón Santiago mantienen viva la tradición que es impulsada con el liderazgo del arzobispado mediante un novenario de actividades.

A lo largo de los años esta tradición hispana de fuerte origen religioso ha sido alimentada con otras manifestaciones y han surgido símbolos que consolidan esa identidad expresada en íconos tales como el río Yaque, marchantas, coches, Monumento, Águilas y La Información, entre otros.

En el ámbito de la actividad cultural tiene instituciones centenarias emblemáticas, liderazgo empresarial de proyección nacional con incidencia en asuntos públicos y ejemplar vanguardismo patriótico y político, con signos diferenciadores que refuerzan el orgullo de que Santiago es Santiago.