Las transferencias desde el Gobierno al subsector eléctrico volverán en 2023 a sobrepasar con creces los mil millones de dólares para poder afrontar el creciente déficit en que incurren las distribuidoras de electricidad, incluida Edeeste, que no logra facturar el 20 por ciento de la energía que distribuye.
Durante los primeros cinco meses de este año se transfirieron a las empresas generadoras RD$35,979.5 millones, en comparación con RD$26,741.5, erogados durante igual periodo del 2022, lo que representa un 51 % del monto consignado en el Presupuesto vigente.
Un informe del Centro Regional de Estrategias Económicas Sostenibles (Crees), publicado ayer en Diario Libre, revela que a marzo de este año las pérdidas acumuladas por las empresas distribuidoras de electricidad se situaron en 33.3 % para un incremento de 1.7 % en comparación con el primer trimestre de 2022.
En esas estadísticas compiladas por el economista Miguel Collado Di franco, de Crees, se establece que las Ede adquieren una mayor cantidad de energía a un precio promedio por kilovatio hora de 16.5 centavos, en relación con el año pasado que promedió 15.0 centavos.
Por esa misma razón, el precio de la energía cobrada pasó de 15.5 centavos de dólar a US$17.7 centavos, pero aun así las pérdidas no disminuyeron y en cambio se incrementan las transferencias del Gobierno al subsector eléctrico para conjurar los déficits de las administradoras de electricidad.
No resulta fácil de entender que la Distribuidoras del Este (Edeeste) ni siquiera factura una parte de la energía que sirve, a lo que se agrega que no logra cobrar una porción significativa de su facturación, razón por la cual el Gobierno le inyectara recursos adicionales para incrementar su capacidad de servicio.
Como aspectos positivos se resalta que el Ministerio de Energía y Minas ha logrado consolidar nuevas inversiones en la construcción de unidades generadoras que agregan centenares de megas al sistema, además de los proyectos de tres nuevas plantas en Manzanillo que producirían más de 800 megas.
Aun así, por diversas razones, el Gobierno no ha logrado reducir el monto de recursos que debe transferir al subsector eléctrico para conjurar las pérdidas operativas generadas por las distribuidoras de electricidad, lo que al menos en uno de los casos, las propias autoridades atribuyen a deficiencia de gerencia.