El ministro de Hacienda, Simón Lizardo, planteó que para el Gobierno resulta una carga pesada el actual esquema de exoneraciones y exenciones o “gasto tributario”, debido a que en el año 2014 representó una suma superior a los 200 mil millones de pesos, lo que equivale al 50 por ciento de los ingresos fiscales de ese año. Por ello, el funcionario abogó por una revisión del “gasto tributario” del Gobierno, o sea lo que el fisco deja de percibir por exoneraciones y exenciones a diversos sectores empresariales.
Consideró “muy alto” este monto, que en República Dominicana equivale al 50% de los ingresos fiscales del Estado y a un 7% del Producto Interno Bruto (PIB), mientras la presión tributaria se ubica en apenas un 14% del PIB.
“El gasto tributario es muy alto, estamos hablando de más de RD$200,000 millones, es decir un 7% del PIB, eso tiene que ir a una discusión posterior, porque no es que el gasto tributario sea del todo malo, es que es muy alto en comparación con los ingresos del Gobierno, es el 50 por ciento de la presión tributaria”, dijo el funcionario al periodista Héctor Herrera Cabral, en el programa D’Agenda, de Telesistema.
Lizardo subrayó la necesidad de incrementar los ingresos del Gobierno para poder afrontar las necesidades de la población, aunque afirmó que la actual administración no planea llevar a cabo un aumento de impuestos, mediante otra reforma tributaria.
“No estamos hablando de un aumento de impuestos, de reforma fiscal; ese es un tema que no contempla esta gestión de Gobierno… pero sí medidas administrativas que redunden en reducir la evasión”, apuntó Lizardo, al recordar que según la Estrategia Nacional de Desarrollo (END), para este año la presión tributaria debería ser de 16% del PIB.
“Esto tendrá que discutirse en el futuro con todos los agentes de la economía, para que se modifiquen problemas estructurales como ése, o sea con un ingreso de un 14% y una necesidad de gasto de un 23%, obviamente siempre tendremos un déficit”, puntualizó.
UN APUNTE
Mayores ingresos
El ministro de Hacienda destacó la necesidad de que se produzca un incremento de los ingresos del Gobierno para éste poder afrontar las necesidades de la población, aunque planteó que no debe ser aumentando impuestos sino mejorando las recaudaciones