El PLD
Buenas notas
El Partido de la Liberación Dominicana (PLD) sabía que estaba compelido a pasar la prueba en materia de organización y concurrencia de su congreso para renovar sus estructuras internas. En el proceso que transita tras la derrota electoral y la pérdida del poder, el PLD está abocado a una intensa lucha para restaurar su imagen como uno de los principales partidos del escenario político. La elección de Danilo Medina como presidente era más que obvia por su condición de líder de la organización. El triunfo del exsenador Charlie Mariotti para la secretaría general no dejó de sorprender, a pesar de la intensa campaña que había desplegado. Se le veían más posibilidades a Rubén Jiménez Bichara, quien en el último tramo recibió el apoyo del saliente secretario general Reinaldo Pared. Tanto Mariotti como Jiménez Bichara, quien ocupó el segundo lugar, son cercanos colaboradores del expresidente Medina. El congreso, durante el cual la matrícula del Comité Político fue elevada de 35 a 45 miembros y se amplió a mil los integrantes del Comité Central, representa el punto de partida de otra etapa en la historia de un partido que ha sido sacudido por la división, las deserciones y la persecución por corrupción de prominentes exfuncionarios y dirigentes. El PLD, que constituye la segunda fuerza electoral, envía un mensaje de lucha por la recuperación de su espacio político y del poder con un congreso que legitimó el liderazgo de Danilo, entre otros aspectos importantes.

