Opinión Articulistas

Algo más que salud

Algo más que salud

José Díaz

Buscar en el interior

Continuamos lo del jueves que dejamos a mitad por cumplir con una aclaración al artículo anterior. Nos quedamos citando las declaraciones del cerrador de los Leones del Escogido, ahora también campeones del Caribe, y de paso aclaro que algunos lectores me corrigieron que el Escogido solo tenía 8 años si alcanzar la corona.

Rafael Montero, pobre hasta la medula, con una madre sola y 9 hermanos en un pueblito perdido en Elías Piña, agrega:
“Mi mamá siempre nos dio una buena crianza y nos enseñó que las cosas se ganan con sacrificio y trabajando fuerte siempre.

Montero nunca perdió la esperanza de convertirse en pelotero profesional. Sin embargo, su camino no fue fácil. Participó en más de 100 pruebas con diferentes equipos y, en ocasiones, fue relegado a tareas menores, como recoger pelotas de foul. “Varias veces llegué a llorar, porque veía gente con menos condiciones que yo, que le daban la oportunidad, pero nunca tiré la toalla ni perdí la fe, y hoy los resultados se ven”.

Su perseverancia dio frutos cuando firmó con los Mets de Nueva York, debutó en Grandes Ligas en 2014.
En la temporada 2022, Montero se consolidó como relevista, registrando una efectividad de 2.37, con 5 victorias, 2 derrotas y 14 salvamentos en 71 apariciones. Su desempeño fue fundamental para que los Astros se coronaran campeones de la Serie Mundial.

El éxito continuó cuando, en noviembre de 2022, firmó una extensión de contrato por tres años y 34,5 millones de dólares con los Astros. Este logro le permitió brindar una vida mejor a su familia.”
Su historia es similar a la de Juan Marichal, Miguel Diloné, Julián Tavárez, Pedro Martínez y Manny Ramírez, entre muchos otros que persistieron y tuvieron fe en sí mismos; igual en muchos otros deportes, el mundo social y empresarial.

Lo vivido por Montero tiene más valor humano que el negocio del beisbol, se lo asegura el que hace “algo más que salud”.