Tulio Jiménez,
Diputado.-
No fue su culpa saltarse la luz roja, pero de todas formas se trató de una burla su explicación sobre la inaceptable reducción de 10 a 3 años de prisión por el delito de corrupción contemplado en la revisión del Código de Penal. El cúmulo de penas con que quiso justificar la decisión fue rechazado como lo que es: un pretexto.
Aquiles Correa,
Comediante.-
Reconoció que se excedió y pidió perdón por insubordinarse contra la patrulla de la Policía que lo obligó a cerrar un bar de su propiedad que operaba en violación del toque de queda. Por el cambio de actitud merece una oportunidad, pero con la advertencia, claro está, de que otra violación significará la sanción establecida por las leyes.
Minoru Matsunaga,
Director de Cestur.-
Tras los escándalos que han zarandeado al Cestur estimula su compromiso de rescatar la credibilidad y la confianza de la entidad. Hay que celebrar la determinación de Matsunaga de actuar con apego a la ética Una auditoría para determinar cómo ha operado la entidad daría más crédito a su compromiso.