Situación social
Señor director:
El pasado miércoles el diputado Elpidio Báez, presidente de la comisión de reforma de la Policía Nacional, se refirió con duros términos al cuerpo del orden. “La Policía está podrida entera, está podrida desde los pies hasta la cabeza y por vía de consecuencia, se impone no una simple reforma, sino una transformación radical de la Policía Nacional”, dijo el legislador..
Yo creo que dentro de la Policía Nacional hay sectores que constituyen un peligro para la seguridad nacional, pero no son todos.
Creo que esos jóvenes de la Dirección Central de Investigaciones Criminales (Dicrim), que hace varios días apresaron a los miembros de una banda de asaltantes de comerciantes y personalidades haitianas, son una parte sana de la Policía Nacional.
También creo que son sanos centenares de policías que sin tener acceso a un barrilito sino, a un mísero sueldo, rinden un excelente servicio y acuden diariamente a una universidad para obtener un título de profesional.
Conozco el caso de un escribiente de la Policìa, graduado en psicología, que dentro de poco impartirá clases en una universidad, pese a que es un simple cabo de la Policía, cuyo salario no llega a ocho mil pesos.
A mi querido colega Elpidio Báez, porque es periodista, se le olvida que la Policía Nacional está formada por dominicanos, que tienen las mismas virtudes y defectos que los diputados, los periodistas (que los hay muy podridos), que los comerciantes, que los sindicalistas y que cualquier dominicano común.
Me parece que la reforma no debe ser solo de la Policía Nacional, sino, de la sociedad en su conjunto, porque es esta la que está podrida y dentro de ella todas sus instituciones.
¿Acaso numerosos niños no fueron violados por un alto jerarca de la iglesia católica que escapó libremente del país?
¿Cuántos políticos han sido acusados de desfalco, prevaricación y otros delitos graves sin que nunca hayan sido procesados por tales hechos?
Queremos reformar a la Policía Nacional, pero no a los partidos. Queremos reformar al que presta servicio por un salario vil, mientras funcionarios y legisladores despilfarran el dinero de los contribuyentes, sin que nadie intervenga.
Elpidio, eso es “coger piedras para los mas chiquitos”.
Atentamente
Ruddy Germán Pérez
periodista