Respetemos la Constitución
Señor director:
Recientemente República Dominicana ha conmemorado el 171 aniversario del nacimiento de su primera Constitución. Esto ocurrió el 6 de noviembre del año 1844, en la ciudad de San Cristóbal. Hablar de la Constitución es hablar de los fundamentos institucionales para una vida organizada. Es en ella donde los conceptos de soberanía, independencia y libertad, hallan sustentación. Es allí donde constan nuestros derechos humanos, civiles, sociales y políticos, que nos llevan a tener una vida más digna. Allí también están escritos los deberes que como ciudadanas y ciudadanos nos corresponde observar. La Constitución es ley de leyes, Carta o Sustantiva, a la cual nos corresponde vigilar, para hacer que sea respetada y aplicada, para que no sea letra muerta.
Pienso que, a propósito del 161 aniversario de este significativo acontecimiento, a nuestra Constitución hay que hacerle, más que actos oficiales y de rutina, un acto de desagravio, pues tantas veces ha sido agraviada por gobernantes que han visto en ella el obstáculo para eternizarse en el poder más allá del tiempo establecido, y persiguiendo esos intereses, han logrado hacer con la Constitución un traje a la medida de sus propósitos. Se calculan en 39 las veces que la Constitución ha sido modificada, lo cual es, en buena medida, una exageración que forma parte de las carencias institucionales que algún momento habremos de superar.
El acto de desagravio hay que hacerlo para enseñarle a la presente y futura generación la sacralidad y la reverencia con que debe ser tratada la Ley Sustantiva. Es desconcertante observar que las mismas personas que contribuyen a violar la Constitución, y que levantan las manos para que se modifique, atendiendo a intereses no nacionales, sean las primeras en celebrar el Día de la Constitución. Cuando observamos esta burla, es cuando más justificado se hace que hagamos, en todo el país, un acto o varios actos de desagravio a la Carta Magna.
Atentamente,
Melania Emeterio R.
Adelantan Navidad
Señor director:
Muchas empresas, emisoras de radio y canales de televisión han adelantado la Navidad, llevando a cabo actividades propias de esa época.
Aunque muchos se oponen a tales adelantos y los rechazan, es una forma de olvidar los graves problemas que afectan a los dominicanos.
Atentamente,
Fiordaliza Pérez