Presos ¿fugados?
Casos como la fuga de seis reclusos del cuartel de la Policía de Moca elevan todavía más la desconfianza en los guardianes del orden público. Nadie en su sano juicio cree que esos reclusos planearon una estrategia para escapar de la prisión, sino que fueron auxiliados por encargados del recinto. Si no es así, las autoridades tienen que buscar la manera de demostrarlo con pruebas irrefutables. La Policía de Moca informó que los agentes que estaban de guardia la noche del lunes, cuando huyeron los reclusos, están bajo arresto. Los fugados, entre los que figura un haitiano detenido por la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD), estaban presos por diferentes delitos. Cabe recordar, a propósito, de que es casi universal el criterio que relaciona cada delito callejero con la presencia de algún agente del orden público. Esa es la realidad. Es posible que exhiba la recaptura, si no es que caen en algún intercambio de disparos, como una muestra de eficiencia en materia de persecución. Pero la realidad es que la Policía tiene por todos los medios que evitar escándalos como el de la fuga de los reclusos si quiere mejorar su imagen.
