NUEVA YORK.– El Concilio de Iglesias en Estados Unidos abogó por el endurecimiento de las penas contra los funcionarios públicos hallados culpables de corrupción en la República Dominicana, al considerar que este flagelo ha causado daños profundos e irreversibles al país.
En un documento público, firmado por el reverendo Ruddy Durán, la entidad religiosa sostiene que, en los últimos 25 años, la corrupción en los gobiernos encabezados por los partidos PRD, PRSC, PLD y PRM ha despojado al pueblo dominicano de más de dos billones de pesos.
Según el informe, el desfalco de estos recursos ha tenido un impacto devastador en sectores esenciales, dejando sin acceso a una educación digna a miles de niños, lo que los condena a una vida marcada por la desigualdad y la falta de oportunidades.
Asimismo, el Concilio señala que la corrupción ha frenado el desarrollo del sector eléctrico, afectando directamente el crecimiento económico y la calidad de vida de la población. De igual manera, denuncia graves consecuencias en el área de infraestructura pública, provocando retrasos en la construcción de carreteras, hospitales, escuelas y otras obras fundamentales para el desarrollo nacional.
El documento subraya que estos actos de corrupción no solo representan pérdidas económicas, sino que constituyen una forma sistemática de despojo social, al limitar el acceso a servicios básicos como la energía eléctrica, las telecomunicaciones, la seguridad ciudadana, la protección de los recursos naturales y la seguridad territorial.
De manera especial, el Concilio advierte que la corrupción en el sistema de salud tiene consecuencias aún más graves, al generar sufrimiento humano, deterioro de la dignidad y pérdida de vidas, afectando de forma directa a niños, adultos y envejecientes.
“La corrupción no solo roba recursos; roba sueños, esperanza, oportunidades y vidas”, concluye el documento, al tiempo que llama a las autoridades dominicanas a asumir una lucha firme y efectiva contra la impunidad.

