El presidente Danilo Medina recibió ayer el tétrico informe de que los embalses están en su estado más crítico de los últimos 15 años y que el agua almacenada no alcanza para suplir necesidades de consumo humano, riego y generación eléctrica.
En el marco de ese dramático panorama presentado por los encargados de instituciones involucradas con el servicio de almacenaje y distribución de agua, el mandatario ha dispuesto la ejecución de un plan de contingencia que mitigue los efectos de la escasez de lluvias.
Al Presidente se le dijo que la mayoría de los acueductos no almacenan ni reciben agua suficiente para poder atender los requerimientos de la población, porque los embalses de las presas están en un nivel crítico, por lo que tampoco se puede suplir necesidades de regadío sobre millones de tareas cultivables.
Para que se tenga una idea sobre la gravedad de la situación, se señala que el déficit en el suministro de agua potable al Distrito Nacional y provincia Santo Domingo es de 75 millones de galones, lo que se agrava con una reducción de cinco millones cada día.
Se ha dicho que el plan de mitigación de los efectos de la sequía incluiría la prohibición de lavar vehículos y regar jardines, aunque lo mejor sería que la población asuma plena conciencia sobre la necesidad de ahorrar agua.
No se pronostica que ocurran precipitaciones de intensidad y duración que ayuden a llenar los embalses y a animar ríos y cuencas pluviales, por lo que la ciudadanía debería entender que el país ha ingresado en una situación de emergencia que va de mal en peor.
ORO
La de ayer fue la mejor jornada para el deporte dominicano en los Juegos Panamericanos de Toronto, Canadá, con las medallas de oro conquistadas por Luguelín Santos, en los 400 metros planos y la karateca Ana Villanueva, quien derrotó con puntuación absoluta a la chilena Gabriela Bruno.
Esas dos preseas, junto a otra de oro, cinco de plata y ocho de bronce, elevan el orgullo del gentilicio nacional que agradece a sus atletas los esfuerzos que realizan para colocar a la República en el pebetero de los Panamericanos.