MINNEAPOLIS.- A sus 26 años, el campocorto de los Astros, Jeremy Peña, ya se ha ganado la reputación de ser un jugador decisivo en los playoffs.

Peña, quien reemplazó al ícono de la franquicia Carlos Correa el año pasado como campocorto, se ganó esa notoriedad el otoño pasado cuando ganó el premio al Jugador Más Valioso de la Serie de Campeonato de la Liga Americana y la Serie Mundial, una racha de éxitos sin precedentes para un novato. Y, por si acaso, también ganó un Guante de Oro de la Liga Americana.

Las expectativas para la segunda temporada de Peña estaban por las nubes y soportó algunos problemas de crecimiento durante el verano. Peña estuvo de regreso en la victoria de los Astros sobre los Mellizos en la ALDS, con varias jugadas defensivas clave.

El más grande llegó en la primera entrada de la victoria de Houston por 3-2 en el Juego 4 en Target Field cuando atrapó un lineout de Jorge Polanco y ponchó a Edouard Julien, quien abrió el juego con un doble y no pudo regresar a la base “Cuando Polanco lo golpeó, vi el primer paso de Julien a su derecha”, dijo Peña. “Fue una jugada que se hundió. Simplemente intenté hacerlo en un solo movimiento, captarlo y sumergirme en ello”.

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Teniendo en cuenta que Royce Lewis conectó un jonrón momentos después, poder conseguir la doble matanza podría haber salvado el día para los Astros.

“Siempre digo que cuando puedas sacar las salidas, las aprovechas”, dijo Peña. “En la postemporada, cada jugada puede ser enorme. Lewis conectó el jonrón, y si Julien hubiera estado en segunda, habría sido un jonrón de dos carreras, y quién sabe qué pasará. Simplemente traten de defender bien y jugar el uno para el otro”.

Peña decayó defensivamente en el campocorto según varias métricas, pero les recordó a todos su valor con el guante varias veces cuando más importaba.

Por: Brian McTaggart
MLB.com