El jurista Ramón Antonio Veras (Negro) denunció que el empresario Adriano Román no sólo planificó asesinar a su hijo José Jordi Veras, sino que también acordó darle inicio a una campaña por los medios de comunicación escritos, de radio y televisión, destinada a presentar la tentativa como un asunto pasional.
Dijo que esa campaña, que en principio tuvo un costo de 950 mil pesos y que fue ejecutada por personas que definió como sicarios morales, surtió parcialmente su efecto, llegando hasta un punto que la Fiscalía y la Policía tuvieron que recurrir ante el obispo de Santiago para que llamara a capitulo a esos sectores que habían tomado el caso como referencia de disputas personales y comerciales.
La denuncia de Negro Veras está contenida en un escrito producido con motivo de cumplirse hoy 6 meses de la tentativa de asesinato contra su hijo, el 2 de junio de este año.
Después de iniciada la campaña de desinformación y contaminación de la investigación judicial y policial, Jordi, mi familia y yo tuvimos que estar enfrentados contra la Asociación de Malhechores del 2 de junio y contra los sicarios morales que siguieron actuando hasta el día que fueron detenidos y exhibidos ante la opinión pública, Adriano y sus sicarios materiales, manifestó Negro Veras.
Manifestó que en una ocasión declaró que confiaba en la investigación de las autoridades, lo que motivó a que los autores de la campaña sacaran como conclusión que él había negociado con la Fiscalía, la Policía y los autores de la tentativa para que todo quedara en silencio.

