El presidente Luis Abinader, quien desde un primer momento ha marcado el norte de las relaciones diplomáticas, volvió a privilegiar la condición de Estados Unidos como primer socio comercial del país.
Lo hizo con claridad, ocupándose al mismo tiempo de despejar cualquier confusión sobre el interés y las inversiones de China en el país.
Los chinos pueden incursionar en cualquier sector que consideren, menos en áreas consideradas estratégicas como telecomunicaciones, puertos y aeropuertos.
Es una manera de guardar distancia con la nación asiática, a la vez que se fortalecen los lazos con Washington.
Se podrá pensar y catalogar al Gobierno de entreguista, pero Abinader fue bastante objetivo al resaltar que aparte de constituir el primer mercado, en Estados Unidos viven alrededor de dos millones de compatriotas que nutren la economía con sus remesas.
El Nacional
Es la voz de los que no tienen voz y representa los intereses de aquellos que aportan y trabajan por edificar una gran nación
