El uso de la tecnología educativa, actualmente, es la herramienta didáctico por excelencia de mayor impacto en la comunidad escolar.
No es un secreto, que los planteles educativos, tanto públicos como privados, se han visto en la necesidad de actualizar el currículo académico con la integración e implementación del uso de la tecnología educativa. La finalidad, que se ha constituido imprescindible, es ofrecer a los estudiantes una educación al servicio del desarrollo cognitivo, académico y social.
La tecnología educativa, se podría definir, como aquellas herramientas diseñadas y elaboradas con el objetivo de fortalecer el proceso de enseñanza-aprendizaje de manera eficiente y actualizada, a través del uso de las TIC.
Hoy en día, al caminar en un plantel escolar, nuestros ojos y oídos se pueblan de términos, equipos y recursos visuales relacionados con el uso de diferentes programas educativos en líneas.
En el mismo orden, podemos observar a los estudiantes interactuando frente a un dispositivo digital, como: un ordenador, computadora portátil, tableta y cualquier otro instrumento o dispositivo electrónico de nuestra Era Digital.
Que nuestros estudiantes estén expuestos a los avances de la tecnología educativa, va más allá de “oír” o “ver”. Que los docentes y las familias despierten un pensamiento crítico de cómo nuestros niños y niñas están siendo expuestos al uso de las TIC, nos remonta a las preguntas, ¿Estamos capacitados en el uso de la tecnología educativa? ¿Cuáles son los programas educativos en líneas? ¿Qué ofrecen al desarrollo académico y social de los estudiantes? ¿Cómo están dichos programas implementados al currículo académico? ¿Están estos programas modificados para la población de educación especial? La lista de sugerencias para evaluar rápidamente la eficacia de los recursos didácticos digitales es amplia, pero más amplia debe de ser la responsabilidad de los docentes, familias y directores en el derecho a la igualdad de exponer los estudiantes al avance de la tecnología educativa.
De acuerdo a la doctora Verónica Marín Díaz, coordinadora del programa de doctorado en Metodología de la Ciencia de la Educación (UNPHU-UCO), señala: “hablar de herramientas digitales para la educación inclusiva conlleva hacerlo de TIC inclusivas, es decir de recursos digitales creados o re-elaborados con el fin de propiciar una información de calidad para todos, ya acordes a la circunstancia de todos”.
La Era Digital en la que estamos adsorbidos, nos exige una sólida colaboración entre el Estado y la sociedad, para vigilar los estándares adecuados que beneficien al desarrollo académico y social de todos los estudiantes sin distinción de género, raza, religión o discapacidad. Cabe resaltar que el término “discapacidad” se refiere a la condición bajo la cual ciertos individuos presentan deficiencia física, sensorial o intelectual.
La inclusión de estudiantes con algunas de las características ya mencionadas al sistema educativo “regular” o “normal”, es un derecho humano.
Brindarles a ellos el servicio y beneficio del uso estructurado e individualizado de la tecnología de la información es de suma importancia para el crecimiento académico y social. Ningún estudiante debe dejarse atrás. El boom de la tecnología los incluye a todos, sin excepción, que es el fin principal de la educación.
Como padres, directores, supervisores o docentes no podemos permitir que se nos infle el ego al decir: “En el colegio o escuela pública de mi hijo hay computadoras”. La comunidad escolar se enfrenta a la demanda del uso de la tecnología de la información y la comunicación. La vanguardia está en exigir el uso adecuado de la tecnología educativa en la vida académica de todos y para todos. En otras palabras, el apoyo pedagógico de la tecnología debe de ser una realidad que empodere a todos los involucrados en el boom de la tecnología educativa. La tecnología de la información de la comunicación inclusiva debe ser una realidad para todos los que hoy están en un salón de clases y mañana serán el porvenir de la nación.
La autora es escritora y docente de Educación Especial.