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El pastel en hoja, un plato con sello “Serie 23”

El pastel en hoja, un plato con sello “Serie 23”

Los pasteles en hojas más demandados en "Amable Pasteles en Hojas" suelen ser las variedades de plátano y res o yuca, relleno de pollo./ Foto: Duany Núñez.

La gastronomía dominicana suele ser extensa en texturas y sabores, teniendo siempre en cada plato el sello criollo que nos caracteriza dentro y fuera del territorio nacional.

Y es que, aunque muchas recetas pueden ser oriundas de otros países, en República Dominicana toman su propia versión. Un ejemplo de ello son los pasteles en hojas, una masa hecha a base de víveres blancos y amarillos, que se rallan y mezclan con leche, bija, aceite y naranja agria para luego rellenar en porciones con carne de res, pollo, cerdo o lo que el comensal desee.

Aunque se puede variar la base (guineos verdes, plátanos maduros, yautía blanca y amarilla, ñame y auyama), lo cierto es que el plátano verde es el ingrediente preferido no solo para la masa, también las hojas de dicha planta usadas para la envoltura.

Pasteles en hojas, un plato con sello “Serie 23”
Pasteles en hojas envueltos en hojas de plátano. / FB: Amable Pasteles en Hojas

Según datos históricos, es de origen africano porque en ese continente se acostumbra a cocinar en hojas de plátanos. Algo parecido también al tamal, en México, o las hayacas en Venezuela.

Este platillo tradicional durante la temporada navideña, se puede consumir en cualquier época del año.

Su preparación no es tan sencilla y  lograr la consistencia ideal no cualquiera lo logra.

Por ello, mucho se debate sobre dónde se preparan los mejores pasteles en hoja del país y aunque exista más de un lugar, en la lista no puede faltar “Amable Pasteles en Hojas”, un reconocido restaurante en San Pedro de Macorís, cuya oferta es la única protagonista del lugar y por la que cientos de comensales visitan a diario el establecimiento.

“El negocio en principio era una cafetería que tenían mi papá y mi mamá cerca del mercado municipal y ellos lo que vendían era sándwiches, no pasteles”, explicó Rudy Amable Mateo, gerente general del restaurante que lleva 56 años de existencia.

Agrega que, su madre “doña Gisela” fue a quien se le ocurrió incluir la venta de pasteles en hoja pese a la negativa inicial de su esposo, Amable Mateo, por creer que descuidaría con ello la preparación de los panes y jugos. Semanas después de empezar a venderlos, la demanda fue tan grande, que decidieron solo vender pasteles.

Mateo aseguró que la fama que acompaña a los “pasteles de don Amable”, como también se conoce el negocio, se debe al empeño que se ha puesto en mantener siempre la misma calidad.
Rudy Amable Mateo, gerente del restaurante./ Por: Duany Núñez

“Ya después se tuvo que habilitar una parte en la casa para seguir con la preparación pero ese espacio también fue quedando pequeño hasta que logramos tener la fábrica destinada solo a la preparación de los pasteles y otro local para la venta”, precisó el menor de dos hijos que procreó la pareja y quienes hoy, tras la muerte de sus padres, llevan las riendas del negocio.

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Indicó que durante más de medio siglo, han sido muchas las personalidades que llegan al restaurante para consumir los afamados pasteles en hojas, desde políticos, comunicadores, peloteros, artistas e influencers nacionales e internacionales.

Fachada del restaurante en San Pedro de Macorís.

“Hemos tenido la visita de muchas personalidades nacionales e internacionales, entre ellos Arcángel, Vakeró, Félix Victorino, peloteros, comunicadores, políticos, influencers de diferentes puntos del país, es difícil recordarlos a todos ahora”, indicó.

De acuerdo a los niveles de venta, sostuvo que el más vendido es el de plátano relleno de res, seguido por el relleno de pollo y el de yuca-pollo. También ofrecen el pastel en hoja relleno de vegetales y otro a base de harina de maíz, aunque ambos en menor demanda; así como el tipo buffet para eventos.

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Mateo aseguró que la fama que acompaña a los “pasteles de don Amable”, como también se conoce el negocio, se debe al empeño que se ha puesto en mantener siempre la misma calidad y sabor en el producto, razón por la que desde la fábrica se suplen también las sucursales ubicadas en La Romana, Higüey, Plaza Sambil y El Millón, las dos últimas en el Distrito Nacional.

Fábrica

Con una fachada de casa tradicional, nadie imaginaría que a escasa distancia del restaurante funciona la fábrica donde diariamente se preparan miles de pasteles en hojas en sus diferentes versiones.

Erick Humprey, encargado de Planta, Producción y Distribución, acompañó a un equipo de El Nacional durante el recorrido para mostrar el proceso de elaboración de este delicioso platillo.

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“El primer paso es recibir la hoja para el pastel, una parte fundamental del plato, lo que le da el sabor característico de pasteles Amable. Tras recibir las hojas, se depuran, se cortan, se limpian y se procede a marear en una máquina tipo horno para eliminar cualquier tipo de bacterias”, explicó.

A la par, en otro espacio se cocinan las carnes de res y pollo que serán el relleno para el plato. Destacó que cada día se preparan más de 700 libras de carne.

Mientras todo esto ocurre, un par de mujeres se dedican a preparar la masa sea de plátano, guineo verde o yuca, la que mezclan con el resto de condimentos antes de pasar al área donde se le agrega el relleno y se envuelve manualmente en hojas de plátano, seguido por papel de hornear y se amarra para ponerlo a hervir.

De allí salen listos para su consumo, donde quiera que sea su destino.

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“Desde aquí se suplen a todas las sucursales que tenemos. Nosotros manejamos muy estrictamente el tema de las recetas y medidas para garantizar que el cliente consuma el mismo producto sin importar donde lo compre”, enfatizó Humprey.