Los honorables deberían ser la solución, pero esos son pocos ante los “onorables”
Estamos languideciendo como pueblo, en medio de una absurda sequia de principios y vergüenza que, poco a poco, cual, si fuese el ataque de una colmena de termitas, corroe las bases que nos sostienen como nación, como Estado y que, cada día, los políticos se empeñan en enmarañar la cruda realidad. La ausencia de honorables […]
 
  
   
                                 
                                 
                                 
                                 
                                 
  
  
  
  
  
 