El Departamento de Estado de Estados Unidos mantiene a República Dominicana entre los países que recomienda a sus ciudadanos no visitar por riesgo de contagio de la covid-19, a pesar de que en esa nación han muerto más de 160 mil personas y casi cinco millones han sido contagiadas por la pandemia.

Se aconseja no venir aquí debido a las medidas de salud, seguridad y condiciones relacionadas con el coronavirus, pero no se menciona que el Centro para el Control y Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC) proyecta que en los próximos días en esa nación morirían más de 20 mil personas por la covid-19.

Se entiende que se emita algún tipo de advertencia a turistas que planeen viajar República Dominicana sobre restricciones o medidas de carácter sanitario aplicadas aquí, pero no parece justo que se deje entrever que los peligros de contagios son mayores que los prevalecientes en Texas o la Florida.

El CDC estadounidense pronostica que el número de decesos por la pandemia a final de agosto estaría en el rango entre 174,946 a 189,433, lo que deja claramente establecido que la advertencia debería estar dirigida a quienes decidan quedarse en Estados Unidos.

Los principales destinos turísticos nacionales aplican con mucho rigor protocolos de prevención de contagios de coronavirus alineados con lo sugerido por la Organización Mundial de la Salud (OMS), garantía ofrecida por los hoteles a las grandes empresas de tour operadores.

Una nación sindicada como epicentro mundial de la pandemia, con más de cinco millones de contagios y 160 mil fallecidos, no puede alarmar a sus ciudadanos sobre exagerados niveles de peligro sanitario en países que se afanan por relanzar su sector turístico.

Una cosa es informar a los estadounidenses que planean viajar como turistas a esta nación sobre medidas restrictivas que se aplican para contener la pandemia y otra es dibujar un cuadro infernal que incluye advertencia sobre delitos violentos, incluidos el robo a mano armada, el homicidio y la agresión sexual.

La mayoría de los estados de la Unión Americana han sido sacudidos por violencia derivada de protestas raciales, brotes y rebrotes pandémicos, sin que se advierta a los ciudadanos del mundo que no deben visitar a esa gran nación. Estados Unidos suele exagerar su proclamada condición de ombligo del mundo.