República Dominicana podría consolarse alegando que no fue el único país excluido del informe anual sobre el índice global de impunidad por supuestas irregularidades e inconsistencia en la información oficial, pero eso no quita que la decisión sea vergonzosa.
Entre los países excluidos, todos considerados con altos niveles de impunidad, están, además de este, Argentina, Brasil, El Salvador, Granada, Trinidad y Tobago y Venezuela.
El índice, que prepara la Universidad de Puebla, determinó que Honduras, Paraguay, Guyana y México se encuentran entre los 10 países de los 69 medidos con sistemas de justicia y seguridad más endebles y donde menos crímenes se resuelven.
La pregunta es ¿en qué lugar hubiera quedado República Dominicana de haber sido evaluado a la luz de la realidad? Nadie ignora que la cantidad de crímenes y escándalos sin aclarar forman un elevado montículo, dejando la impresión de que las leyes no se aplican.
Lo que ha pasado con la exclusión de República Dominicana por informaciones inexactas e inconsistentes es un mensaje que las actuales autoridades deben captar en toda su magnitud porque es posible que no se trate del único caso.