Seré lo más coherente posible, no voy a criticar lo que en el pasado hemos en algún momento apoyado, no obstante explicaré la necesidad que han tenido casi todos los gobernantes dominicanos en repostularse de manera consecutiva a como dé lugar.
Siempre se ha dicho que el Presidente que no aspire a reelegirse pierde apoyo y la fidelidad del funcionarato a sus órdenes, pero, sobre todo, que se expone a sufrir de la soledad del poder de manera temprana, ¿cuánto habrá de cierto en todo eso?, ¿será que nadie puede frenar su adicción al poder?, o ¿solo será el miedo que le causa el tener que bajar del Olimpo?, estas y varias interrogantes más tenemos que buscarles respuesta, para entender un poco la insensata reelección que tanto en el 2020 como hoy se sigue buscando de igual manera.
Será causalidad, obra de la providencia, de un karma o de la mala suerte, pero en los últimos 100 años de vida Republicana solo los presidentes de origen perredeísta elegidos constitucionalmente no lograron reelegirse, aunque todos de una manera u otra lo intentaron, don Antonio, Jorge Blanco e Hipólito Mejía; el presidente Abinader buscaría romper ese designio fatalista, o es que el barco del PRM no cuenta con ningún otro capitán probado para llevarlo de nuevo a un puerto seguro.
La insensatez se produce cuando no se muestra en una persona la cualidad del buen juicio, de la prudencia, de la madurez en sus actos y decisiones, como al parecer se ve por estos lares oficialistas, porque de verdad que no existen las más mínimas condiciones para en un acto de cordura existencial abocarse a una acción tan aventurera, pero como tenemos que someternos a la rigurosidad científica e histórica, les explicaré con datos no con mi particular criterio apreciativo, más bien con hechos comprobables, las razones de nuestra aseveración en este “decálogo a una imprudente repostulación”, veamos:
En los últimos 17 procesos electorales en el continente americano, solo en dos casos se ha impuesto el partido oficial en Nicaragua con el FSLN, con sus tintes particulares que todos conocemos, y en Canadá, donde el Partido Liberal del actual Primer Ministro Justin Trudeau, pese a obtener muchísimo menos votos que la oposición ganó más escaños, y logró retener el poder haciendo mayoría en alianza con otros partidos, pero su votación fue de apenas un 32% de los votos, aquí se necesitan tener el 50% más 1 para ganar la Presidencia de la República. (Continuaré en otro entrega)
Por: José Francisco Peña Guaba