Aturdido por la recurrencia del gobierno de Haití en vedar ingreso por la frontera de aves y huevos, el Gobierno procura ahora exportar esos productos hacia Venezuela, para lo cual el Ministerio de Agricultura intentará que se cumpla con el protocolo sanitario requerido por ese mercado.
República Dominicana carece de una política coherente de promoción de exportaciones, a pesar de que dispone de múltiples ventajas comparativas, incluida la geográfica y la disponibilidad de tres grandes esquemas de libre comercio.
Es verdad que Haití, después del de Estados Unidos, representa el principal mercado para productos dominicanos, especialmente agrícolas y pecuarios, pero es imperdonable que todavía el Gobierno y sector productivo no hayan consensuado la renovación de la oferta exportable nacional ni identificado nuevos destinos de exportación.
El Tratado de Libre Comercio Cafta-RD, en vez de servir para promover exportaciones hacia el mercado de Estados Unidos, ha devenido en principal razón del crónico déficit de la balanza comercial con Estados Unidos, que ya supera los tres mil millones de dólares.
En términos relativos, las exportaciones a Centroamérica han disminuido, en contraste con el incremento de las importaciones de bienes y servicios desde esa región, clara señal de que la parte dominicana no ha sabido aprovechar los esquemas de desgravación arancelaria que caracterizan a esos mercados.
¿Por qué el Centro de Promoción de Inversiones y Exportaciones (CEI-RD) no realiza estudios de mercado para identificar nuevos nichos para productos nacionales en Estados Unidos y Centroamérica? ¿Por qué no se realiza una ofensiva de promoción de exportaciones hacia el mercado europeo y aprovechar así el esquema de asociación económica vigente con Europa?
Desde hace muchos años, se reclama del Gobierno y sector productivo promover una profunda recomposición de la oferta exportable nacional, que permita suplir el nicho hispano de Estados Unidos, colocar en Centroamérica y el Caribe instrumentos de labranza, rones, cervezas, muebles y otros artículos agrícolas e industriales, así como aumentar las exportaciones hacia Europa.
La verdad es que República Dominicana carece de una política de promoción de exportaciones, razón por la cual carece de estudios de mercado que le permitan actualizar y diversificar su oferta exportable. Es por eso que no se ha podido aprovechar el vasto mercado venezolano y esa es la razón por la que hay que soportar la humillación que se infringe del otro lado de la frontera.

