La XXVIII Bienal está consumada. Es la principal fiesta de las artes visuales, la más vieja de América, tras su fundación, en 1942, por el director general de Bellas Artes, Rafael Díaz Nietzchse, creador del movimiento moderno de las artes en la República Dominicana. Vuelve a darse y esta vez abierta con presteza y entrega sobre en mano. Con los laudos que premian las diez obras visuales, nueve por cada una de las categorías y un Gran Premio de Raúl Morilla, inicia un evento que debe ser respaldado por artistas y público.
durante los tres meses que estará disponible en el Museo Morilla gana en justa decisión que honra la capacidad absorbente de la atención con su instalación, adornada por su despliegue de diseño intimista y denunciante, la 28 Bienal de Artes Visuales queda establecida como el principal acontecimiento de la plástica dominicana, pero no es suficiente.
Morilla convoca encierro, soledad, opresión y silencios. Su instalación sobrecoje por el efecto de absorción total del espectador, incluso con signo que sugiere solemnidad. La instalación, ubicada en la planta 0 (sótano, al lado del patio Español) del Museo de Arte Moderna, constituye un trabajo de una enorme demanda conceptual y de elaboración con la sincronización y producción visual de sus elementos de video, jugando con el desnudismo masculino sin alborotar pieles sensibles. Merecido el Laudo.
Las categorías
Hay buen criterio de premiación en el universo de lo expuesto. En las nueve obras premiadas, prima sentido estéticom conceptos terminados y en buena parte l compromiso social que se observa. En la obra gráfica, “La pena que nos une” (serie Feminicidio)”, de Julio César Peña, construye un buen discurso visual en torno al crimen de mujeres, sin panfleto y con altura. Grito artístico contra una masacre sistemática y paulatina .
En la instalación, Saudade, de GinnyTauléPaiewonsky, mucho más sutil y de una carga artística de caminos nuevos, es probablemente la obra más densa y lírica en torno al tema. Ubicada en la planta 0 del Museo, invita a la complicidad y la responsabilidad ante aquel corazón solitario símbolo que puede ser de pasión y martirio, la cama.
Angelita Casals son su fotografía, “Heredad”, logra un sentido de protección familiar y futuro. Impactante su foto. El espectador siente escuchar voces y miradas, estando allí en silencio.
Joan Jiménez logra uno de los aciertos más contempporáneos con su acción plástica Microcosmos VI.
De Martín López, y su premiado video Luna Klolousky”, no tenemos criterios por no haberlo visto. Pasaremos en detalle para apreciarlo.
No obstante
Falta avanzar mucho más en las corrientes de vanguardias plásticas. Muchas de los estilos y giros similares a estas obras eran perfectamente admitidas hace 20 años en el Mercado del Arte de Madrid (Arco), meca en la que todavía se sigue esperando que el arte visual dominicano sea objeto de una dedicatoria, como se hace cada año con un país. Este año es Colombia.
Apertura política
Quedan atrás los tiempos en que se limitaba el planteamiento político plástico crítico, admitiendo, por parte de jurado de selección, piezas de un alto contenido que ilustra y denuncia hechos de la realidad, tal cual ocurre con la pieza No ha lugar, así se evacúa una sentencia, del artista dominicano residente en NY, Dio-genes Abreu, quien la envió por Gadejo, en el convencimiento de que sería rechazada.
El jurado le dio una lección de tolerancia y responsabilidad, al admitirla.
Pintura y escultura
Siguiendo una lamentable tendencia internacional, la pintura, en tanto arte noble y la escultura, siguen perdiendo espacios.Hay calidad técnica y buen concepto en la mayor parte de las pinturas, pero el número no es representativo . Faltan buenas firmas pictórica, cuyos suscribientes se y han alejado para dejar el espacio a las nuevas figuras y las modernas tendencias visuales.
1. Gran Premio. Instalación: Raúl Morilla. Claustro para el Edén
2. Pintura. “Desplazamiento involuntario”, Carlos Baret.
3. Instalación. Saudade, Ginny Taulé Paiewonsky.
4. Obra Gráfica, La pena que nos une (serie Feminicidio)”, Julio César Peña.
5. Escultura. “M3”, de Delio García.
6. Dibujo “Vaina mía”, Magno Laracuente.
7. Cerámica correspondió a “Solo azul”, de Cristina Tiburcio.
8. Acciones plásticas “Microcosmos VI”, Joán Jiménez .
9- Fotografía, Heredad, Angelita Casals.
10. Video y/o multimedia, ”Luna Klolousky”, Martín
López.