Padecer de colesterol alto podría ocasionar riesgos irreversibles para la salud, ya que aumenta la posibilidad de sufrir enfermedades cardiovasculares tales como infartos, embolias y hemorragias cerebrales, entre otras”, así lo señala la doctora Laura de Castro, dietista de Santiveri.
Explica que para los expertos el nivel de colesterol sería normal por debajo de 200, aunque para cifras hasta 240 se considera “normal alto”. No obstante la Fundación Española del Corazón advierte que entre 200 y 240, el riesgo de padecer alguna enfermedad cardíaca se duplica respecto a cifras por debajo de 200 mg/dl.
De Castro indica que que la mayoría de las recomendaciones médicas sólo le conceden un valor preventivo a la alimentación cuando pueden tener un enorme poder sobre el aprovechamiento y metabolización de las grasas, sin los efectos indeseados de los medicamentos.
“La forma de alimentarnos puede intervenir sobre el control del colesterol si evitamos o restringimos los alimentos que aportan colesterol como huevos, grasas procedentes de animales o de la leche (manteca, embutidos, mantequillas, quesos, nata, etc”, dijo la dietista.
Otro punto que menciona es seguir una dieta fundamentada en frutas y verduras abundantes, alimentos a base de harinas integrales o cereales completos, semillas, grasas de origen vegetal, reducir el consumo de carnes y aumentar el consumo de pescado.