«Desde que pisé el tabloncillo en el primer juego de la Summer League (Liga de Verano), supe que tenía chance de jugar NBA. Quiero que el mundo vea del buen material que estoy hecho», así expresó el joven prospecto de Portland Trail Blazers, Luis David Montero, a quien la afición dominicana conoce popularmente como Pinguilín.
El jóven nativo del séctor Los Praditos, en el Distrito Nacional, recientemente agregó su nombre a la exclusiva lista de jugadores dominicanos que han sido contratados a la NBA. Afirmó que lo único que ha cambiado es su rutina de entrenamientos, que ahora es más intensa, pero sigue siendo el mismo.
«Estoy enfocado en ser mejor jugador, perfeccionar mi juego cada día y llegar lo más lejos que Dios me permita», expresó Montero luego de completar una intensa sesión de entrenamientos para llegar en unas mejores condiciones a la pretemporada de los Trail Blazers.
Confiesa que ha comenzado a notar la diferencia entre ser un jugador profesional y un aficionado, pues la rutina de entrenamiento y el trabajo en las últimas semanas, lo hacen sentirse mucho más preparado para lo que viene.
Dijo que «antes sólo iba a la cancha a entrenar, períodos de una o dos horas, ahora le estoy dedicando por lo menos, seis o siete horas en diferentes sesiones y mi cuerpo es la muestra de eso».
El Pollito lo cambió
Pinguilín afirma que un día vio jugar al puertoplateño Kelvin -El Pollito-Peña, reforzando un equipo en el basket superior del Distrito Nacional y de inmediato nació su interés por el baloncesto. Soltó el guante y la pelota de béisbol e inició el rumbo a lo que se perfila una carrera larga en el mejor baloncesto del mundo.
Dijo que se siente orgulloso de pertenecer a Portland, pues fue el equipo que le dio el mejor trato y el que mostró mayor interés en que perteneciera a su escuadra.
Montero es un claro ejemplo de que nada es imposible, pues el ha podido alcanzar lo que millones de jugadores de baloncesto sueñan, que es poder fichar para un equipo de la NBA.
«Eso no me ha cambiado en nada, sigo siendo el mismo», lo único que ha cambiado es su responsabilidad, con su cuerpo y dentro de la cancha, pues la lucha ahora es mucho más fuerte.
Sabe que tiene que competir con jugadores veteranos y jugadores que lo superan en físico, pero está consciente de que él es el único responsable de su permanencia en el máximo nivel.
Agradece a Capellán
Dio mucho crédito al trabajo que está haciendo Emyi Capellán, su preparador físico, quien me ha demostrado que puedo hacer cosas, que sólo soñaba con apenas pocas semanas de trabajo.
“Lo elegí a para trabajar porque ya había escuchado de él”. Trabajó con jugadores de la NBA como Francisco García, y además con algunos jugadores de Grandes Ligas como Rymer Liriano y Domingo Santana, entre otros, por lo que sabía que él era la persona idónea para seguir adelante con este objetivo”, confirmó Montero.
Explicó que la rutina de trabajo consiste en fortalecimiento con pesas, en el Kakata Gym, de Capellán y que trabajan en el desarrollo de las habilidades al aire libre, para desarrollar sus herramientas de juego y en la noche realiza lances en la cancha de El Millón, club en el que se formó como baloncestista el promisorio prospecto.
Para el espigado jugador de 6´8 de estatura, «este trabajo que estamos haciendo se va a notar desde que llegue a los Estados Unidos, ellos (Portland Trail Blazers) se sorprenderán con mi avance».
Sobre los críticos, dijo que cada vez que lo menospreciaban eso lo enfocaba más en su objetivo y que ahora sólo piensa en demostrar todo lo que puede hacer, para que los que no confiaron en él se den cuenta de lo equivocados que estaban.
UN APUNTE
No escogido en el draft
El jóven jugador dominicano no fue escogido por ningún equipo en el Draft de la NBA 2015, sin embargo, fue invitado a presentarse a varias organizaciones y firmado finalmente por el equipo de Portland Trail Blazers, como jugador no drafteado.
EN NÚMERO
3
Temporadas
El contrato que firmó Luis Montero con los Trail Blazers sería de tres años, sólo el primero garantizado y las próximas dos temporadas, se activarían según su desempeño.