Por: Eglenin Morrison
news@superemailrd.com
(2 de 2)
En la primera parte de este artículo, que se publicó el viernes, exponía las peripecias de un comerciante para quien el “no” solo significaba significaba nueva oportunidad, para resaltar el valor, la grandeza y la integridad del fallecido líder sudafricano, Nelson Mandela.
Y resaltaba que la palabra líder, que en el inglés antiguo significaba conducir a los viajeros por el camino, tenía más de mil años de existencia. También decía que hoy la principal prueba de un líder no es celebrar victorias, sino superar derrotas o momentos de crisis que debemos convertir en oportunidades.
Había quedado en que el protagonista de una de las historias que más admiro, quien había rehusado vender un establecimiento comercial en 200 mil dólares y que luego lo perdió todo cuando el Gobierno norteamericano decidió construir una carretera, porque fueron desviados del camino todos sus clientes. Ese empresario, en lugar de amilanarse, comenzó a visitar negocios para ofertar la receta que había sido la base de su éxito.
Después de llegar a la suma de mil visitas, la 1001 significó el cambio de rumbo de la vida de este hombre, dando origen a lo que todos conocemos como el más exitoso negocios de Pollos en todo el mundo, Kentucky Fried Chicken. Y su fundador fue coronel Sanders.
En épocas de crisis la clave será siempre y así lo demuestra la historia el poseer una actitud positiva frente a los desafíos de la mala fortuna momentánea, estoy convencido de que el futuro es prometedor y que el secreto del éxito quedo plasmado en la pregunta que le realizo un periodista a Nelson Mandela el 11 de Febrero de 1990 día que salió del confinamiento de 27 años de prisión, el periodista le pregunto… ¿qué significo para usted durar todos esos años preso?, y el respondió sin dudar y mirando a los ojos: Yo nunca estuve preso, la prisión es un estado mental, yo siempre fui un hombre libre.

