El presidente Luis Abinader declaró ayer de alto interés el Plan de Seguridad Vial 2025-2030, cuya elaboración y aplicación procura reducir los accidentes de tránsito en las principales vías y carreteras, lo que será refrendado por un Pacto Nacional por la Seguridad.

Durante el período 2016-2024 han fallecido 26,257 personas por accidentes viales, una cifra alarmante que sitúa a República Dominicana entre los países con mayor tasa de muertes a causa de colisiones viales, por lo que la iniciativa oficial debe ser acogida por todos los actores involucrados con el tránsito y el transporte.

El Pacto por la Seguridad Vial será coordinado por el Instituto Nacional de Transito y Transporte Terrestre (Intrant), cuyo titular, Milton Morrison, definió la siniestralidad por accidentes de tránsito como una pandemia, por lo que se requiere promover educación y sensibilización en la ciudadania sobre ese flagelo.

Cada año, en el país mueren alrededor de tres mil personas por choques, deslizamientos o atropelladas en calles, avenidas, autopistas y carreteras, de las cuales el 67 % corresponde a motociclistas, con edades promedio entre 18 y 35 años, y cerca de 120 mil sufren lesiones parciales o permanentes.

Esta vez urge que el Gobierno tome en serio la ejecución de ese Plan de Seguridad Vial, que tendría una duración de cinco años, amparado en un pacto entre autoridades, transportistas, gremios, sindicatos y juntas de vecinos, porque se requiere con urgencia detener ese sangrado social.

El director del Intrant dijo que ya esa institución asumió el control del sistema de semaforización y que en los próximos días será sincronizado mediante uso de inteligencia artificial, además de anunciar que el próximo año se procederá a sacar de la vía pública a miles de chatarras. Ojalá que todo no quede en el anuncio.

Para alcanzar estándares internacionales en materia de tránsito y transporte en torno a un sistema vial más seguro y eficiente, se requiere promover campañas educativas encaminadas hacias el respeto a la legislación de tránsito, pero también la aplicación irrestricta de la ley.

El anuncio del presidente Abinader en el encuentro La Semanal con la prensa, referido a la ejecución de un Plan Nacional de Seguridad Vial evitaría la pérdida de miles de vida en accidentes de tránsito, solo si se aplica a pie de letra, con incremento de los agentes de la Digesett, señalización y mejoría de acceso vial, educación ciudadana, salida de las chatarras, identificación de los motociclistas y aplicación de la ley a los infractores. Ojalá que ahora sea del dicho al hecho.