SANTIAGO. El Arzobispado de aquí abogó para que se impongan la sensatez y responsabilidad en quienes dirigen el país, al poner en marcha acciones, para autorizar gradualmente el reinicio de actividades económicas.
La sugerencia la hace el organismo religioso a propósito de los reclamos de sectores empresariales, de servicios y de otros géneros, para que el Gobierno suavice algunas restricciones y permita la reinserción gradual de los sectores productivos nacionales.
Por intermedio del editorial de su vocero escrito, el semanario Camino, correspondiente a la edición de este domingo titulado “Sin prisa”, el Arzobispado hace referencia de medidas parecidas tomadas en varios países europeos, donde han comenzado a suavizar algunas restricciones que fueron impuestas de urgencia para frenar la propagación del COVID-19.
Empero, resalta que esas nuevas medidas en esas naciones “son el resultado del comportamiento ejemplar de sus ciudadanos quienes se acogieron al nuevo estilo de vida, contribuyendo así a detener esta pandemia”.
En su editorial Camino atribuye el comportamiento de los europeos a que en esas naciones hay orden, disciplina y sobre todo consecuencias para los violadores de las normas y leyes establecidas.
Y que el descenso del número de contagiados y fallecidos en esas naciones no las han llevado a la impaciencia de tomar decisiones a la ligera, evitando así un nuevo brote del coronavirus, que sería más catastrófico porque encontraría una población más vulnerable y debilitada.
Por ello, el semanario estima que ese panorama de los países desarrollados “debe ser una advertencia para nosotros en cuanto qué hacer a partir del 17 de este mes, cuando concluye la extensión de la cuarentena”.