Santo Domingo.-El monto del presunto fraude en que incurrieron los implicados en la Operación Coral todavía no se puede precisar, porque sigue aumentando ya que todos los días aparecen elementos nuevos, dijo la titular de la Dirección General de Persecución del Ministerio Público.
La procuradora adjunta, Yeni Berenice Reynoso, expresó este miércoles que en la primera evaluación el monto de fraude era de tres millones de pesos, pero sólo el imputado el coronel Rafael Núñez de Aza, administró un monto superior a los 700 millones de pesos, pero siguen apareciendo otras propiedades en distintos lugares.
Las consideraciones fueron externadas por la representante del Ministerio Público en el desarrollo de la medida de coerción que preside la jueza Kenya Romero, de la Oficina Judicial de Servicios de Atención Permanente del Distrito Nacional.
Dijo que el “entramado” que administraba el mayor general Adán Cáceres Silvestre, tenía siete modalidades para realizar sus operaciones entre ellas nóminas adulteradas, pagos de servicios de inteligencia, viáticos, pago de salario para que los beneficiados devolvieron una parte entre a sus superiores.
En estas operaciones están implicados la pastora evangélica, asimilada policial Rossy Maybelline Guzmán Sánchez; el cabo policial Tanner Antonio Flete Guzmán, hijo de la pastora; Raúl Alejandro Girón Jiménez y el sargento de la Armada, Alejandro José Montero Cruz.
Otro representante del Ministerio Público que forma parte del equipo en la vista es
Wilson Camacho, titular de la Procuraduría Especializada de Persecución de la Corrupción Administrativa (Pepca).
La audiencia se inició en las primeras horas de la mañana de este miércoles y continúa desarrollándose en una de las salas de audiencias del Palacio de Justicia del Centro de los Héroes.
