Primera Fila

Mensaje
La captura en Estados Unidos del expresidente peruano Alejandro Toledo es otro sonoro mensaje en la persecución de la corrupción relacionada con los sobornos en 12 países pagados por la constructora Odebrecht para la adjudicación de obras públicas. Con la detención el exmandatario (2001- 2006), contra quien se había emitido una orden internacional de captura y quien enfrenta ahora un proceso de extradición, se equivocó si pensaba que en California estaba fuera del alcance de los tentáculos de la justicia. Toledo está acusado de recibir 20 millones de dólares de Odebrecht a través de un testaferro y amigo personal, el empresario José Maiman, por la adjudicación de una carretera. Por ahora ha sido el único exmandatario peruano, con excepción de Alan García que se suicidó, que no ha sido interrogado desde el 2000 a la fecha por los sobornos de Odebrecht.