El tribunal de Atención Permanente de la provincia Duarte impuso ayer tres meses de prisión preventiva como medida de coerción a un hombre señalado por el Ministerio Público como el principal cabecilla de una red de narcotráfico que lideraba en esa ciudad y otros pueblos del nordeste del país.

El juez de la instrucción Darvin López dictó la medida de coerción contra Fausto Castillo Brito, considerado líder del narcotráfico en esa zona.

En la solicitud de medida de coerción, la fiscalía de esa demarcación indicó que López fue detenido por miembros de la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD) el pasado 30 de abril, mientras transitaba por la calle Principal, del sector Los Maestros de San Francisco de Macorís.

La instancia señala que el imputado al notar la presencia de los agentes antinarcóticos emprendió la huida, no logrando su objetivo, ya que las autoridades lo capturaron.

El Ministerio Público detalló que Castillo Brito se desplazada a bordo de una pasola, y al momento de ser revisada se ocupó en su interior una porción de un polvo blanco, presumiblemente cocaína, con un peso aproximado de 204.6 gramos; una porción de un vegetal, que se presume es marihuana, con 312.9 gramos aproximado, así como una porción de un material rocoso, que se cree corresponde a crack, con un peso aproximado de 202.1 gramos.

La fiscalía, agrega, además que el imputado, se considera el principal “cabecilla” de unos de los grupos criminales más importante que opera en esta provincia, con control absoluto de varios puntos de drogas en sectores como San Martin y diferentes municipios de la provincia.

El Ministerio Público, representado en la investigación por el fiscal Nieve Gallardo, ha calificado los hechos como violación a los artículos 4 Letra B, D, 5 letra A, 6 letra A, artículo 75 párrafo I y II de la ley 50-88, en perjuicio del Estado Dominicano.

El Ministerio Público precisó, que el imputado tiene un amplio historial delictivo en el nordeste, destacando en ese sentido, que en el año 2019 fue arrestado mediante orden judicial, por el mismo ilícito penal, donde se le ocupó drogas, armas de fuego de diferentes calibres, equipos electrónicos, dinero, vehículos y motores, así como matrículas y títulos de propiedad, entre otras pruebas.

En torno a ese hecho, en el año 2021, el Segundo Juzgado de la Instrucción dictó la resolución de apertura a juicio, admitiendo de manera total la acusación presentada en su contra, por estar sustentada en pruebas útiles, pertinentes y relevantes que sustentan la investigación.

Castillo Brito agotó una serie de recursos de apelaciones, logrando que la Corte variara la medida de coerción que pesaba en su contra y le concediera la libertad, luego de haber pagado una garantía económica por un monto de tres millones de pesos.