“A puertas cerradas” (Jean Paul Sartre) ha logrado una versión dominicana digna y seductora.
Las funciones de “A puerta cerrada” (Jean Paul Sartre,) principal obra de teatro existencial del agudo filósofo francés, y que estableció en el imaginario popular su concepto de que “El infierno son los otros”, ha servido para evidenciar que el público desea volver a las plateas y que son viables horarios nuevos y sin precedente.
Las funciones de la pieza, desde el pasado jueves, se llenaron de público con un promedio de asistencia de 35 personas, en una sala para 100 personas, en horarios de 4:00 de la tarde y 11:00 de la mañana (sábado y domingo).
La pieza tiene el oportuno sentido de un director teatral que apuntó con exactitud cuál pieza elegir para que se estableciera para este 2021, como la producción que debe marcar la escena nacional dominicana, tanto por su trascendencia internacional como por los elementos artísticos y técnicos.
Escenografía
Con una bien lograda escenografía hermética de un habitación sin ventanas, con una sola puerta, definida por líneas rectas, con los efectos especiales para proyectar en las paredes, pinturas clásicas sobre el infierno con musicalización en vivo (tuba, trompeta y piano), con un vestuario, peluquería y maquillaje de gusto preciso.
El valor de la pieza
“A puerta cerrada” es un texto dramático de tendencia existencialista, del filósofo francés Jean Paul Sartré. Es una de las obras que ha estado en las tablas de los principales teatros de Europa y América y ha tenido cuatro adaptaciones al cine: Huis clos (1954), (Jacqueline Audry); A puerta cerrada (1962), (Pedro Escudero); No Exit (1962), (Tad Danielewski) y No Exit (2006), (Etienne Kallos).
Fechas y horario
Las presentaciones son de jueves a domingo, durante julio, en la Sala Ravelo del Teatro Nacional Eduardo Brito. Jueves y viernes a las 4:00 de la tarde. Sábados y domingos a las 11:00 de la mañana y 4:00 de la tarde. Boletas a la venta en la boletería del Teatro Nacional.
Entrada general RD$1,000, con descuentos (30%), por mayoría de edad (65) y descuentos por tener una o dos dosis de las vacunas, hecho que hay que documentar.
