Militarización San Francisco de Macorís.
De los 10 muertos a causa del coronavirus, cuatro han sido en San Francisco de Macorís. En la ciudad también se han detectado alrededor de 30 personas infectadas, solo superada por el Distrito Nacional. La realidad es que en el municipio no se han respetado las medidas dispuestas por el Gobierno para contener la propagación del virus. Y que de no tomarse medidas drásticas y urgentes, como la militarización de la ciudad, la enfermedad continuará haciendo estragos en la zona. Si la gente no entiende hay que hacerla entender. La gente ha continuado realizando sus actividades normales sin prestar atención a las consecuencias del virus ni las medidas de las autoridades para contener su propagación. El coronavirus no es un juego que se puede desafiar a suerte y verdad. Lo que ha ocurrido en Italia, España y Estados Unidos es un buen ejemplo de que el mal no se puede dejar cobrar fuerza. Los militares desplegados en San Francisco de Macorís tienen que obligar a la población a acogerse a las restricciones o simplemente pagar las consecuencias. Además de la militarización está bien que se fumigaran calles y centros que constituyen fuentes de propagación de la enfermedad. El caso es tan serio que hasta el alcalde electo, Siquió Ng de la Rosa, figura entre los afectados en la ciudad. De la misma manera que en San Francisco de Macorís las autoridades tienen que actuar en cualquier otro sitio para que se cumpla con la cuarentena contra el coronavirus.
