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Reclaman el cierre matadero mercado

Reclaman el cierre matadero mercado

Matadero de pollos de Honduras funciona sin ningún control sanitario ni mediambiental.

Residentes y comerciantes del entorno del mercado de Honduras se quejan de los inconvenientes que está creando un matadero de pollos, ya que este negocio se ha convertido en un foco de contaminación por ser un criadero de ratas, cucarachas, mosquitos, además de los malos olores que emanan de él.

El matadero, ubicado en la calle Ramón de Jesús Henríquez Rodríguez, justo detrás del mercado de Honduras, opera de 5 a. m. a 10 a. m. en una estructura sucia y destartalada, y por lo que se pudo observar tiene todas las condiciones para ser un criadero de ratas y otras alimañas.

“Mire, gracias a Dios que el ayuntamiento viene todos los días y recoge las plumas y tripas que ellos sacan y dejan a hi afuera. Lo que no puede recoger el camión de basura es la sangre y las aguas malolientes que se quedan en calle y acera”, dijo Juan Tavárez quien trabaja en el área.

Lugareños piden que el departamento de sanidad del Ayuntamiento del Distrito Nacional, y de Salud Pública intervengan este negocio ya que opera donde hay más establecimientos comerciales que venden alimentos y comida para consumir de inmediato.

Además hay casas de familia y un pequeño parque para niños a pocos metros del matadero, el cual no tiene las condiciones de higiene y salubridad, e internamente está lleno de cachivaches que sirven de guarida a insectos.

Algo que hay que destacar es que el mercado de Honduras aunque rodeado de uno que otros negocios, un poco inadecuados para el lugar, y a decir de algunos negociantes con pocos visitantes a comprar, sin embargo luce limpio, bien distribuido e iluminado.

Un matadero cuando opera en calles centrales junto a otros comercios debe estar en lugar cerrado, no en enramadas de madera y semiabierto, es decir por seguridad sanitaria hay que operar en estructuras de concreto cerrada con higiene permanente.

“A diferencia de otros sectores aquí lo malos son alguna gente que vienen y tiran la basura fuera de esos tanques que tiene el ayuntamiento en ese sitio para uno echar la basura, y la tiran afuera.
Además el camión viene religiosamente todos los días, entre nueve y diez de la mañana y recoge todo lo que hay”, dijo Francisco Alvarado, vendedor.

Jorge González

Periodista, fotógrafo, reportajista y editor fotográfico de El Nacional