Por elemental no deja de ser una gran verdad, sobre todo ahora que se evalúan las personas que serán designadas en la Junta Central Electoral (JCE) la afirmación del exmiembro y aspirante a presidir el organismo, Eddy Olivares, en el sentido de que esa instancia tiene que operar en armonía con los partidos políticos.
Otras atribuciones de la JCE, como la administración del Registro Civil, no generan tanta incertidumbre como la organización y supervisión de las elecciones.
Al ser uno de los candidatos con más respaldo para presidir el organismo, no obstante la oposición del PRM, la observación de Olivares, quien se definió como independiente en sus decisiones, adquiere más trascendencia.
Parte de la mala imagen que ha afectado a la JCE se debe a la confrontación protagonizada por sus principales funcionarios y técnicos con dirigentes opositores.
El Nacional
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