Después de primarias
El estreno de elecciones internas primarias para elegir candidatos presidenciales, congresuales y municipales en dos de los principales partidos parece que fue exitoso no obstante el reclamo del aspirante opositor al grupo dominante y que controla casi todos los estamentos de poder del Estado.
Las denominadas primarias abiertas en el gobernante PLD y cerradas en el opositor PRM se desarrollaron sin incidentes mayores, con una concurrencia del 30 %, aceptable según parámetros internacionales, que superó los dos millones de los más de siete inscritos en el padrón electoral.
El voto automatizado pasó la prueba al ser asimilado por los sufragantes, por la rapidez del cómputo y la novedosa exposición en tiempo real de los resultados progresivos que logró establecer la Junta Central Electoral para terminar esta fase con transparencia en tiempo sin precedentes.
Queda pendiente el cuestionamiento a la seguridad del programa informático y su vulnerabilidad mediante algoritmo para alterar resultados y favorecer a uno de los dos contendores del partido en el gobierno, como denunciara el expresidente Leonel Fernández, quien desacreditó el sistema.
La oposición superó la prueba sin dificultades con padrón cerrado en que participaron alrededor de 400 mil electores, con victoria cómoda para Luis Abinader y admisión de resultados por parte de Hipólito Mejía, en un gesto que enaltece al ex mandatario y abona la necesaria unidad del novicio PRM.
Quedan interrogantes e incógnitas por despejar como el desenlace final del reclamo del expresidente Fernández y sobre el futuro político del también presidente del PLD que en su derrota cuestiona a la JCE al tiempo que parece no tener espacio para continuar como líder del partido gubernamental.
