TOMÁS VIDAL RODRÍGUEZ
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Los hijos del coronel Francisco Alberto Caamaño no están de acuerdo con la decisión de los jueces de la Segunda Sala del Tribunal Superior Administrativo que ordenó el traslado de unos restos desconocidos al Panteón Nacional, porque no se corresponden con la osamenta de su papá.
El coronel Francisco Caamaño Acevedo hablando a nombre de sus hermanos expresó “no estamos de acuerdo con la decisión del tribunal porque el Instituto Nacional de Ciencias Forenses (Inacif) certificó después de realizarle un estudio de ADN en combinación con sus hijos, que la osamenta que exhumaron del Cementerio Nacional de la Máximo Gómez no se correspondía con la de Caamaño”.
Sin embargo, el coronel Caamaño Acevedo precisó que no le corresponde a ellos responder la decisión del tribunal, sino a la Comisión de Exaltación del ministerio de Cultura.
El coronel Caamaño murió el 16 de febrero de 1973 en la loma de Nizaíto, en la Horma de San José de Ocoa, en un enfrentamiento armado y sus restos desde ese momento están desaparecidos.
El tribunal que dictó la decisión estuvo integrado por los magistrados Federico Fernández, de la Cruz, Mildred Hernández Grullón y Rafael Ciprián, quienes acogieron un recurso de amparo presentado por Nathaly Ramírez Díaz y Claudio Antonio Caamaño Vélez.
Caamaño
El 23 de abril, Francisco Alberto Caamaño Deñó fue exaltado al Panteón de la Patria, 40 años, dos meses y siete días después de su muerte en la zona montañosa de Nizaíto, sección La Horma de San José de Ocoa, el 16 de febrero de 1973.
La medida fue ejecutada cumpliendo con un mandato de la Ley 4-13 del 15 de febrero del 2013 que ordenó que por su compromiso histórico, las obligaciones y porque Caamaño defendió dignamente la soberanía nacional y dirigió el país con el objetivo esencial procurando la preservación de los derechos de las personas, la democracia y la justicia social.
En la misma disposición se precisó que el coronel Caamaño Deñó, será exaltado al Panteón Nacional, pero sus restos no serán llevados a ese lugar, por ahora hasta que los médicos forenses del Instituto Nacional de Ciencias Forenses realicen una prueba de ADN a los restos que descansan en la tumba del cementerio de la avenida Máximo Gómez.
Sin embargo, en la tumba habilitada en el Panteón para los restos del Coronel Caamaño a través de un cenotafio hay una leyenda que dice “a la espera de sus restos.
El procurador general de la República, Francisco Domínguez Brito dijo que estaba en disposición de llamar a una entrevista a los exgenerales que persiguieron y le dieron muerte a Caamaño para determinar dónde están sus restos, pero todavía no lo ha hecho.
