Por sus extensos y complejos requerimientos, puede asegurarse que el próximo gobierno del presidente electo Danilo Medina tendrá que emplearse muy a fondo para poder convertir al turismo en locomotora de la economía y cumplir la meta de incrementar en más de dos millones el número de turistas que visitan el país.

La Asociación de Bares, Hoteles y restaurantes (Asonahores) reclama que se eliminen lo que define como trabas impositivas, que se reduzca sustancialmente el precio del combustible usado por los aviones, que se aplique un adecuado ordenamiento territorial y que se construyan obras que eleven la calidad de vida de las comunidades.

Los hoteleros también reclaman garantía de seguridad en los aeropuertos y autopistas, donde con frecuencia se perpetran atracos contra turistas y viajeros dominicanos, que drenan la imagen de República Dominicana como destino seguro y confiable.

Llama la atención lo revelado por los directivos de Asonahores de que la recepción de cruceros por el puerto de Samaná se disminuirá el año entrante en más de un cincuenta por ciento a causa del acoso de vendedores de diferentes mercancías y servicio, situación que también afectó al turismo de Puerto Plata.

El diagnóstico del sector turístico hecho por los empresarios Rafael Blanco Canto, Frank Rainieri, Julio Llibre y Arturo Villanueva, invitados especiales al Almuerzo Semanal de Grupo de Comunicaciones Corripio, ha de servir como adelanto de la ardua tarea que aguarda al Presidente electo para cumplir su compromiso de convertir a esa industria en eje fundamental de la economía.

Pan y vino

La Iglesia Católica celebra hoy la fiesta litúrgica del Corpus Christi que rememora la Santa Cena de Jesús y sus apóstoles, durante la cual, bendijo el pan e invitó a comerlo, al señalar este es mi cuerpo y luego bendijo el vino y pidió tomarlo como la sangre de mi alianza que se derrama por muchos.

Instituida hace casi diez siglos por el papa Urbano VI, el Jueves de Corpus, constituye una de las más trascendentales fiestas del catolicismo, pues resalta el anuncio del hijo de Dios de que su sangre será derramada en la Cruz para poder convertirse en el cordero de Dios que quita el pecado.

Los votos hoy son para que el sacrificio de Jesús de Nazaret sirva de ejemplo y estímulo a gobernantes y gobernados para que trabajen y luchen sin cesar, por el advenimiento de una sociedad basada en la justicia y equidad, sin las tribulaciones de Pedro ni la traición de Judas.