Fundado en 1941, el Banco de Reservas de la República Dominicana (Banreservas) ha sido una institución clave en el desarrollo financiero y social del país. Ayer, al conmemorar su 83 aniversario, Banreservas reafirmó su impacto sostenido en la economía nacional. Durante su trayectoria, ha evolucionado hasta convertirse en un símbolo de solidez y confianza, extendiendo su influencia en sectores estratégicos para el crecimiento, como el turismo, la agricultura, la construcción y la manufactura.
Su labor va más allá de la función bancaria: Banreservas es un motor de progreso que, al financiar proyectos productivos, ha fomentado el empleo y promovido la inclusión financiera, contribuyendo al desarrollo sostenible en múltiples áreas del país.
Bajo la dirección de Samuel Pereyra, Banreservas ha experimentado una expansión significativa en su cartera de créditos, con más de 453 millones de dólares destinados específicamente al turismo, el banco ha fortalecido una de las industrias más dinámicas del país. Además, la entidad cuenta con una cartera de crédito que asciende a RD$563,665 millones, un respaldo esencial para sectores prioritarios de la economía nacional.
El fortalecimiento de su capital ha sido otro logro destacado de los últimos años. Gracias a la modificación de la Ley Número 13-24, en la que trabajé y por la que voté a favor como legislador, se actualizó la Ley Orgánica del banco.
Tras esta modificación, Banreservas incrementó su capital desde RD$10 mil millones en 2020 hasta alcanzar RD$76 mil millones en agosto de 2024, reflejando una expansión de 660%. Esta medida fortalece su capacidad de capitalización y consolida su posición como líder indiscutible en el sistema bancario dominicano.
Además, el banco mantiene una baja tasa de morosidad, situada en apenas 0.9%, superando al promedio de 1.35% del sistema financiero nacional.
En términos de activos, Banreservas registró un aumento del 69% entre diciembre de 2020 y junio de 2024, consolidándose como líder en el sector financiero.
Este crecimiento ha fortalecido su patrimonio en un 132.2%, manteniendo un índice de eficiencia del 64.2% y permitiendo al banco respaldar inversiones significativas que generan un impacto positivo en las comunidades, incrementando la confianza de sus clientes y reforzando su posición de liderazgo en la banca nacional.
La expansión internacional, con las oficinas en Madrid, Nueva York y Miami, es otro logro significativo, que facilita el acceso a servicios financieros para la diáspora dominicana. Hasta junio de 2024, estas oficinas habían atendido a más de 34,800 clientes y gestionado más de 650,000 remesas.
Por: Orlando Jorge Villegas
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