Las calles del Gran Santo Domingo lucían prácticamente vacías este jueves, luego de la suspensión de las labores de empleados públicos y privados no esenciales, como medida preventiva ante los efectos de la tormenta tropical Melissa que obligó a la emisión de alerta roja para varias provincias por posibles inundaciones.
En un recorrido realizado por El Nacional, solo estaban operando con el personal mínimo, supermercados y colmados, clínicas y hospitales, estaciones de combustibles y empresas de transmisión y distribución eléctrica.
Además de empresas de telecomunicaciones, de funcionamiento continuo (como plantas industriales o de energía, empresas de seguridad y vigilancia privada, así como farmacias.
Resaltó que la previsión se tomó en las provincias Santo Domingo, Distrito Nacional, San Cristóbal, Peravia, San José de Ocoa, Azua, San Juan, Barahona, Pedernales.
Las calles del Gran Santo Domingo están desiertas por la alerta roja ante la tormenta tropical Melissa
Instó que en estas demarcaciones, la población, especialmente en zonas vulnerables debe tomar las medidas necesarias para resguardar su vida y atender a cualquier llamado de las autoridades competentes.
El Gobierno dispuso además que, en todos los casos, el personal deberá limitarse al estrictamente necesario para mantener la atención de esos servicios que la población pueda requerir en caso de emergencia.
Las autoridades instruyeron que las medidas que buscan proteger la seguridad de los trabajadores no afecten sus derechos ni beneficios laborales y que sean reanudas a partir de esta medianoche.
El martes, el presidente Luis Abinader ordenó suspender la docencia y posteriormente las labores de empleados públicos y privados que brindan servicios no esenciales en caso de emergencia.
Ayer se registró un fuerte congestionamiento vehicular y aglomeraciones en distintos puntos de la capital, luego de que empleados del sector público y privado abandonaran sus lugares de trabajo a la 1:00 de la tarde, atendiendo a la disposición del Gobierno ante los efectos de la tormenta tropical Melissa.