Barrios en zozobra
Señor director:
Los moradores de los barrios de la parte alta de la capital de Santo Domingo, viven en zozobra por el auge de la delincuencia y la ausencia de vigilancia policial. Los barrios que corresponden al programa Vivir Tranquilo que auspicia el Ministerio de Interior y Policía, y que están afectados por esta situación, demandan la rápida intervención de ese ministerio hasta lograr la tranquilidad que la gente necesita y merece. Ojala que las autoridades investiguen por los medios mas idóneos, la realidad de lo que esta ocurriendo en los barrios bajo su programa, que nació pensando en la gente.
Todo se ha agravado porque ordenes superiores dispusieron reubicar la mayor parte de los policías del C/2 a prestar servicio en la principales avenidas o corredores de los 19 barrios del aludido programa, dejándolos acéfalos o con muy poca vigilancia. Los policías que debieran estar vigilando, previniendo y/o persiguiendo la delincuencia dentro de todos los sectores han pasado a dichos corredores a proteger negocios, muchos de ellos de venta y consumos de bebidas alcohólicas, billares y demás que anidan y propician conflictos, que ante la escasez de policías deberían pagar su propia seguridad.
Atracos y robos a mano armada en las calles, casas habitadas y en negocios; robo de cables del tendido eléctrico; atracos de motociclistas en motocicletas etc. son parte de las modalidades que usan los delincuentes para sus fechorías, empeorado por una oleada de menores de 12 a 15 años de edad, grupos delincuenciales que proyectan convertirse en bandas bajo la orientación y guía de delincuentes adultos que reciben, protegen y venden las mercancías adquiridas mediante robos y atracos, cuya condición de menores les facilita el acercamiento a sus victimas.
Las infracciones de noche cuentan con la complicidad de los apagones que no cesan ni siquiera los días feriados. Los altos ruidos que nunca han estado controlados como establece la ley, se han incrementado por la ausencia del patrullaje y de la unidad antirruidos que se venia ejerciendo. Capotillo, Luperon, Villas Agrícolas, Villa María, La Cienaga, Los Gandules, Guachupita, Gualey, 27 de Febrero, María Auxiliadora y Mejoramiento Social son partes de los barrios que están sufriendo la zozobra que impone la delincuencia.
l ministerio de Interior y Policía debería revisar esta problemática de los barrios que están bajo el programa Vivir Tranquilo, a ver si la relativa tranquilidad vuelve a llegar a la gente, que es lo más importante de la comunidad. Atentamente
Lic. Santiago Martínez

