En nuestro país hace calor, mucho calor, por lo que la mayoría de veces preferimos quedarnos en casa refrescándonos bajo el aire acondicionado o el abanico, antes que salir a ejercitarnos en el candente sol tropical.
Correr con calor significa que aparezca la sensación de fatiga, lo que nos hace realizar dicha actividad más lenta, y puede hacer que lleguemos a un punto en el que nos desmayemos si continuamos y no nos permitimos descansar. Es importante tomar una serie de precauciones para evitar este tipo de contratiempos.
Hidrátate: tomar agua siempre es importante, pues los electrolitos son nuestros grandes aliados, y al sudar en gran cantidad los vamos perdiendo. Lo recomendable es llevar una botella de agua al entrenamiento e hidratarnos con medio y un litro del necesario líquido por hora.
l Evita ciertas horas del día: no es recomendable salir a correr entre las 11:00 de la mañana y 3:00 de la tarde, las temperaturas estarán más elevadas. Lo mejor es ir poquito antes del amanecer (entre 5:30 y 8:00 de la mañana) y poco antes de que caiga la noche entre (4:30 y 6:00 de la tarde). Busca un espacio donde haya mucha sombra, así será más fresco y relajante para ti.
l Corre en la hierba: si el espacio donde decidiste correr se caracteriza por tener mucha hierba, pues aprovéchala y corre sobre ella, pues estará menos caliente y es más cómodo para tus pies.
l Vestuario: este es un punto importantísimo, utiliza prendas transpirables y que sean holgadas, así circulará más aire, y no olvides usar tu gorra.
l Protégete del sol: usa protector solar en crema en el rostro y en el resto del cuerpo que no esté cubierto, y si es tu elección también puedes usar gafas.
l Alerta a los avisos del cuerpo: debes estar atento a las señales que el cuerpo te envía, si sientes mareos, náuseas y fatiga es hora de detenerte, descansar e irte a casa.