Buen ritmo

Tanto por lo concerniente a la creación de empleo como a la mejoría salarial, resulta un gran estímulo para la economía el crecimiento de que ha dado cuenta el sector zona franca.

El despegue ha dinamizado otros sectores, como el inmobiliario, a través de la compra de locales para la instalación de naves industriales. En cuanto al empleo, en 2014 se alcanzó la cifra de 153,342, con la salvedad de que el salario mínimo asciende con los incentivos a 10,500 pesos mensuales.

Las exportaciones registraron un crecimiento de un 6% al alcanzar la cifra de 5,243 millones de dólares. Por los factores que fueren, el sector está viento en popa y ese desarrollo beneficia a la economía. Muchas personas no solo se ganan la vida en las empresas, sino que también aprenden un oficio.

La Asociación Dominicana de Zonas Francas tiene motivos para la satisfacción que ha expresado en torno al dinamismo alcanzado por sus operaciones. Muchas empresas se han marchado y otras han cesado su producción, pero también han llegado nuevas firmas.

El Gobierno ha hecho sus aportes al fomentar la industria del calzado y otros renglones demandados por el mercado internacional. El sector es una grata realidad.