Venduteros muertos
La fiscal del Distrito Nacional, Rosalba Ramos, no acababa de asumir el cargo cuando en la madrugada del 25 de octubre de 2018 agentes de la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD) participaron en una balacera en el sector de Capotillo durante la cual murieron dos venduteros de piña y otra persona resultó herida.
La magistrada garantizó a la opinión pública, a familiares, comerciantes del mercado de la avenida Duarte y juntas de vecinos de la zona que las muertes de Porfirio Sánchez, de 45 años, y de Hansel Arias, de 26, no quedarían impunes.
Pero ya ha pasado un año y todavía se desconoce el resultado de la investigación para establecer responsabilidades sobre las dos muertes, a pesar de que alegados testigos culpan a los agentes de la DNCD.
Al cumplirse el primer año del caso la Federación de Asociaciones de Comerciantes del Mercado Nuevo ha reclamado a las autoridades que se identifique y se someta a los culpables del suceso, ocurrido durante un operativo de la DNCD en Capotillo. Resulta inconcebible, es la verdad, que permanezcan todavía impune dos crímenes ocurridos hace un año.