Clima sombrío
La embajadora de Estados Unidos, Robin Bernstein, había declarado que por la falta de transparencia y otros factores la inversión extranjera en el país era impredecible. Pero el señalamiento de Bernstein no fue más que la introducción de la evaluación del Departamento de Estado sobre el clima de inversiones en República Dominicana.
Un informe destaca que de 2.1 mil millones de dólares que alcanzó la inversión de Estados Unidos en 2017, conforme a las estadísticas oficiales en 2018 disminuyó en un 30%.
Con la más absoluta claridad el Departamento de Estado plantea que la inversión extranjera en República Dominicana está sujeta a la voluntad para implementar reformas que promuevan la competitividad, frenar la deuda pública y someter a la justicia a los funcionarios vinculados con la corrupción.
El señalamiento en torno a la naturaleza de un clima sombrío no admite falsas ni interpretaciones acomodaticias. Establece que bajo el actual clima la participación de capitales estadounidenses en el país continuará a la baja, y seguro que la de inversionistas de otras naciones que se guían por los mismos criterios. La advertencia, pues, está dada.
