Semana

Como cada Domingo

Como cada  Domingo

José Rafael Sosa

Carlos T. Martínez, es un ser excepcional en la crónica de arte y la creación de contenidos que documentan el perfil de las principales personalidades dominicanas, fomentando una crónica histórica contemporánea que se ocupa de hacer honor y homenaje a la calidad humana, el talento artístico y la trayectoria profesional de un caleidoscopio humano local con altísima estatura por sus aportes.

Pero Carlos T. es más de lo que se puede ver en los pasajes de la farándula.
Fundador de muy buena fe y con muy buena visión de la Asociación de Cronistas de Arte de RD, él es historia viva de esa labor ingrata, difícil y desesperante que es la de reconocer el talento en arte popular.

Es un trabajador que se empeña a fondo en recrear la vida artística, impulsar las mejores figuras, aportar el comentario preciso, equilibrado y oportuno.

Este hombre es la tradición de la buena crónica de arte. La documentada, la equilibrada, la de los buenos modales y sentido de su papel.

Se le ve afanar en su colección Grandes Dominicanos y no nos detenemos a reconocer el esfuerzo extraordinario de gestionar entrevistas con gente difícil de ubicar, y entrevistar, gente con sus aires y aceites especiales de exclusivismo, y a pesar de ello lo logra para hacerles el reconocimiento del cual, mereciéndolo, no comprenden el empeño de Carlos T., quien además tiene que enfrentar formidables facturas de impresión y distribución de sus libros, dejando una huella biográfica que buscamos todos cuando uno de esos personajes muere, para poder tener una idea de lo que fueron sus vidas. Ese es Carlos T.

Nadie tiene una idea de la importancia de este hombre…No le hagamos tarde el homenaje que merece. Reconozcámoslo ahora.