Los Dodgers de Los Ángeles se enfrentarán a los Padres de San Diego en el entrenamiento de primavera el domingo, marcando el primer juego entre los dos enemigos de división desde que los Dodgers remontaron contra los Padres para ganar la Serie Divisional de la Liga Nacional en octubre pasado.

Durante esa serie, las tensiones aumentaron en el Juego 2. Los fanáticos de los Dodgers lanzaron objetos a los jardineros de los Padres y el tercera base de los Padres, Manny Machado, tuvo un acalorado intercambio con el entonces lanzador de los Dodgers, Jack Flaherty, después de que Machado lanzó una pelota de béisbol hacia el dugout de los Dodgers, fallando por poco al mánager Dave Roberts.

Dave Roberts calificó el lanzamiento de Machado como «inquietante» en octubre. «Fue inquietante», dijo Roberts. «Obviamente tengo una relación con Manny desde hace años. Había una intención detrás de eso. Casi no me golpea porque había una red. Y eso fue muy molesto. Si hubiera sido dirigido hacia mí, sería muy… es bastante irrespetuoso».

Roberts pareció retractarse de algunos de esos sentimientos iniciales más adelante en la serie, y los Dodgers derrotarían a los Padres y ganarían la Serie Mundial más tarde ese mes.

Parece que cualquier posible resentimiento entre Roberts y Machado se ha disipado desde que terminó esa serie. Antes del partido de entrenamiento de primavera del domingo, Roberts llegó a decir que ama a Machado, quien jugó bajo su mando en los Dodgers en 2018, «como a un hijo».

“Estamos en una serie intensa”, dijo Roberts esta semana, a través de Jeff Sanders del San Diego Union-Tribune . “Él va a hacer todo lo que pueda para ayudar a su equipo a ganar, y yo voy a hacer lo mismo. Lo quiero como a un hijo, y eso nunca cambiará, pero ambos somos competidores”.
Machado también dejó atrás esa serie, diciendo la semana pasada que «el pasado es pasado».

Por: Eva Geitheim
Sports Illustrated